Estudio del CISMID |
domingo, 17 de enero de 2010
¿Por qué no a la demolición total del santuario de Luren?
En los últimos días en los medios de comunicación social de nuestra región se han dado declaraciones por parte de miembros de la Iglesia católica dejando entrever que se demolerá totalmente el Santuario del Señor de Luren, debido a que según ellos, solo se puede rescatar de un 30 a 35% de la estructura actual.
Ante semejante afirmación, entonces, nosotros nos cuestionamos sobre qué tanto implica un 35 por ciento del área del templo, leyendo con detenimiento el estudio del CISMID (colgado en esta página) observamos que dentro de esa “cifra” se encuentran la cúpula, la sacristía, el altar mayor y los brazos del templo (ver imagen de la nota).
Una vez visto esto, nos llamo poderosamente la atención, además del planteamiento de tirar el edificio abajo, que se minimice al punto de tratar de “nada” a algunas de las partes más importantes del templo, como son las antes mencionadas, donde se ubican el Señor de Luren y la mayor parte de imágenes sagradas del templo, no es solo su valor histórico, si no también simbólico.
Volviendo a la pregunta inicial, entonces, la mayoría de iqueños se preguntará, ¿Por qué no demoler?, y la respuesta es simple, pero la dividiremos en 3 partes:
1. Se pierde el patrimonio histórico: Demoler el edificio antiguo sería una pérdida irreparable para la ciudad, dado que estudiando el edificio actual y sus simbolismos se pueden entender los valores que este contiene y la historia de la ciudad durante el siglo XX. El edificio además contiene un valor importante para todos: Fue construido por nuestros abuelos y bisabuelos para ser la morada última del Señor de Luren, la mayor parte de los pobladores de esta ciudad pusieron su empeño en hacer ese Santuario, por lo cual, en su nombre, merece ser conservado en cuanto sea posible.
2. Se pierde el símbolo de la ciudad: Perder el templo, así sea reconstruido de manera similar, implica perder el principal hito arquitectónico de Ica, en otras palabras: Ica no es Ica sin ese edificio. Por otro lado, se pierden turistas: Ya no habrá opción de turismo cultural a la ciudad dado que no quedará el monumento más importante para visitar, los interesados en visitar estos edificios reconocen las reconstrucciones y remodelaciones. No olvidar que el turismo cultural es la actividad que más réditos da en varias regiones.
3. Es más caro: Demoler la totalidad del santuario es una operación más costosa que demorará más el retorno del Señor de Luren a su casa.
Bueno, esas son algunas de las cientos de razones que existen para preservar nuestro Santuario, conoces otra?, postéala aquí, es hora de ser voz en nuestra ciudad.
NO A LA DEMOLICIÓN TOTAL DEL SANTUARIO DE LUREN.
sábado, 17 de enero de 2009
domingo, 26 de octubre de 2008
La nueva cruz de onix
Debemos manifestar nuestra extrañeza por las modificaciones hechas a la tradicional cruz de ónix del Señor de Luren, porque realmente no encontramos motivo para hacerlo.
Prácticamente se ha deformado este emblema iqueño con dos tajos en el lado derecho, corriendo la cabecera de la cruz, también hacia este lado y mandando al señor para la izquierda.
Cabe recordar que la cruz al igual que el templo fue realizado con el esfuerzo de todos los iqueños, y que por lo tanto forma parte de nuestra memoria colectiva, así que, en nuestra opinión, no existe justificación alguna para tales modificaciones, ¿A menos que se quiera hacer la cruz mas acorde a lo moderno?
Los iqueños merecemos una explicacion.
viernes, 10 de octubre de 2008
La Comisión Episcopal para los Bienes Culturales de la Iglesia se pronuncia sobre Luren
La Comisión Episcopal para los Bienes Culturales de la Iglesia, órgano de la Conferencia Episcopal Peruana, cumple con informar lo siguiente:
Como es sabido por nuestra comunidad, debido al sismo del 15 de agosto de 2007 se produjeron irreparables pérdidas de vidas humanas, lo cual lamentamos profundamente, así como el inicio de secuelas y consecuencias dejadas por este desastre natural, afectando a la población y a su patrimonio edificado religioso.
Muchas de estas edificaciones patrimoniales, a lo largo de su existencia, sufrieron los efectos de numerosos sismos, hechos que poco a poco fueron afectando sus estructuras de barro y madera, no habiéndose realizado, en muchas de ellas, las intervenciones técnicas adecuadas para su mantenimiento, reforzamiento y estabilización.
Otras edificaciones, sin embargo, fueron intervenidas con concreto, acero, ladillo, siendo éstos, materiales constructivos ajenos a la originalidad de la edificación, lo que hizo incompatible su adaptación estructural con el adobe, colapsando la infraestructura de muchas de ellas por este motivo.
El Instituto Nacional de Cultura procedió a retirar, inexplicablemente, la condición de Patrimonio
Cultural de la Nación a las Iglesias de San Clemente de Pisco; así como a las de Guadalupe, Santa María del Socorro, Virgen de las Nieves y al Santuario del Señor de Luren, todas en la provincia de Ica.
A diferencia de este Santuario, los otros cuatro templos precitados han sido demolidos en su integridad, causando irremediable pérdida a la identidad cultural y religiosa de esta región y de nuestro país. Al haberse retirado la condición de Patrimonio Cultural de la Nación al Santuario del Señor de Luren, icono de la religiosidad iqueña y del Perú, ésta se encuentra desprotegida legalmente, pasible de ser demolida en cualquier momento.
Por los motivos expuestos, la Comisión Episcopal para los Bienes Culturales de la Iglesia se ve en la obligación de instar a las autoridades nacionales encargadas de proteger y salvaguardar nuestro patrimonio, para que se le restituya al Santuario del Señor de Luren la condición de Patrimonio Cultural de la Nación, por cuanto este Templo, al igual que los otros que fueron demolidos, es susceptible de poder ser intervenido con técnicas de restauración adecuadas y apropiadas, sujetas a la normatividad nacional e internacional, para su reforzamiento y recuperación, y continúe siendo el importante icono de fe para la comunidad católica de Ica y de nuestro país, conforme lo establece también la Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia.
domingo, 21 de septiembre de 2008
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